Receta de pastel de tomate y queso cheddar
Paso 1
Haz la corteza. Caliente el horno a 350ºF. Coloque la harina, el bicarbonato de sodio, la sal y la mantequilla en un procesador de alimentos equipado con una cuchilla. Pulsa hasta que la mantequilla se corte en trozos pequeños. Con el motor en marcha, agregue lentamente la leche a través del tubo de alimentación hasta que la masa se una y se asiente en la cuchilla. Retirar y dividir por la mitad. En un mostrador ligeramente enharinado, enrolle la mitad de la masa en una ronda de 11 pulgadas. Úselo para forrar un molde para pastel de 9 pulgadas.
Paso 2
Llenarlo. Coloque las rodajas de tomate, la albahaca y la cebolleta en el molde para pastel. Cubra con la mitad del Cheddar. En una taza pequeña, combine la mayonesa, el jugo de limón, la sal y un poco de pimienta. Vierta sobre los tomates y cubra con el Cheddar restante.
Paso 3
Cubrelo. Extienda la masa restante y colóquela encima del relleno, doblando el borde por debajo y engarzándolo para sellar. Corte 3 o 4 ranuras en la masa para que el vapor pueda escapar. Hornee durante 45 a 50 minutos o hasta que haga burbujas. (Cubra ligeramente con papel de aluminio si la corteza comienza a ponerse demasiado marrón). Retire del horno. Enfríe 10 minutos antes de cortar en trozos.